¿Cómo sabes cuándo es hora de abandonar una organización?
A veces es más perjudicial quedarse que renunciar.
Con frecuencia me piden que ayude a alguien a pensar en la decisión de quedarse o abandonar su puesto actual. Obviamente, si Dios lo llama a quedarse en algún lugar, debe quedarse.
Pero muchas veces, en mi experiencia, nos quedamos por las razones equivocadas. Nos quedamos por un falso sentido de lealtad. Nos quedamos porque tenemos miedo. Nos quedamos porque no sabemos qué haríamos si nos fuéramos.
Las siguientes son situaciones para considerar. Creo que se pueden aplicar si se encuentra en un entorno de iglesia o negocios.
Esta decisión nunca debería tomarse a la ligera. Yo creo en la lealtad. Pero, cuando se ha dado lugar a una cuidadosa consideración y oración, hay algunos indicadores comunes que pueden mostrar de que es hora de pasar a otra cosa.
Aquí hay 10 escenarios que pueden indicar que es hora de irse:
*Cuando Dios te ha liberado de tu compromiso, creo que el llamado de Dios es, en última instancia, a la persona de Cristo, no a un lugar, pero a veces Dios nos tiene en un lugar específico para una temporada específica. Solo puedes ser un líder por una temporada. Si sientes que Dios te ha liberado para buscar otras posiciones, es probable que sea hora de irse.
*Cuando tu trabajo haya terminado, es posible que hayas logrado para lo que te enviaron para lograrlo. Una vez escribí sobre líderes que necesitan un desafío para mantenerse motivados. Si te has puesto demasiado cómodo, puede ser un momento en que Dios te está preparando para un cambio ... un nuevo desafío.
*Cuando su corazón ha abandonado la organización o su visión: a veces necesita reactivar su corazón. Si Dios no te ha liberado del puesto, por ejemplo, entonces debes encontrar la forma de hacerlo funcionar. En muchos casos, sin embargo, estás libre para mudarte a otro lugar. No debes dañar a la organización quedándote cuando ya no tengas corazón para la misión. Si has dejado de divertirte, no sigas haciendo la vida imposible a los demás.
*Cuando no puede apoyar al liderazgo: necesita saber dónde reside el poder en la organización. Es casi imposible cambiar la organización trabajando contra una estructura de poder arraigada. Pregúntate a ti mismo: "Si siempre va a ser así aquí, ¿me contentaría?"
*Cuando su vida familiar o personal está sufriendo, debido a las demandas de la organización: si tiene que descuidar a uno de ellos, a su carrera profesional o a su familia, en veinte años, ¿qué espera que haya sido?
*Cuando su mente comienza a trabajar en contra de la misión de la organización: si prefiere ver que el lugar fracase, en lugar que tenga éxito; claramente podría ser hora de irse.
*Cuando su relación con compañeros de trabajo o líderes se dañe sin remedio, debe tratar de resolver estas diferencias, sin duda debe ofrecer gracia y perdón, pero cuando es obvio que una relación profesional no puede repararse, puede ser hora de avanzar con tu vida.
*Si la organización o la alta dirección se aventura en prácticas inmorales o poco éticas, no se deje atrapar en el próximo escándalo de noticias.
*Cuando se encuentra físicamente enfermo si el trabajo se le pasa por la mente: el fin de semana (o cuando no está trabajando), si el estrés emocional es mayor de lo que puede manejar, es posible que deba proteger su salud durante su carrera.
*Cuando no tienes la energía suficiente para tirar de tu propio peso, sea por el motivo que sea, ya sea porque te has rendido, estás aburrido o simplemente no puedes mantener el ritmo, si reduces la productividad y no lo haces. No tiene el incentivo para mejorar, tal vez es hora de un cambio en su lugar de trabajo.
Por favor entiende. No soy un derrotista. Dios puede dejarte en un ambiente miserable por una temporada ... o incluso años. Ciertamente lo hizo con algunos de los hombres y mujeres en la historia de la Biblia. También creo que los tiempos descriptos anteriormente no siempre se deben ver como experiencias negativas. Algunas veces Dios usa las experiencias difíciles de la vida para atraernos a Él y abrir nuestros ojos a la próxima oportunidad que Él tiene para nosotros. Nunca hubiera hecho algunos de los movimientos que hice en la vida ... que sé que ahora eran de Dios ... si no hubiera sido por mi situación miserable en ese momento.
Al mismo tiempo, creo que hay veces que un falso sentido de lealtad, co-dependencia o miedo irracional nos impide avanzar aunque Dios no nos está manteniendo en la posición. En mi opinión, proteger nuestro corazón es más importante que proteger un puesto profesional. No tomaría una decisión únicamente sobre uno de estos escenarios, pero si se aplican muchos de ellos ...
Considere esta lista y compárala con tu situación, luego pídale a Dios que confirme en su corazón:
-Si eres libre de irte
-Si ahora es el momento.
¿Qué agregarías a mi lista?
Ron Edmondson
A veces es más perjudicial quedarse que renunciar.
Con frecuencia me piden que ayude a alguien a pensar en la decisión de quedarse o abandonar su puesto actual. Obviamente, si Dios lo llama a quedarse en algún lugar, debe quedarse.
Pero muchas veces, en mi experiencia, nos quedamos por las razones equivocadas. Nos quedamos por un falso sentido de lealtad. Nos quedamos porque tenemos miedo. Nos quedamos porque no sabemos qué haríamos si nos fuéramos.
Las siguientes son situaciones para considerar. Creo que se pueden aplicar si se encuentra en un entorno de iglesia o negocios.
Esta decisión nunca debería tomarse a la ligera. Yo creo en la lealtad. Pero, cuando se ha dado lugar a una cuidadosa consideración y oración, hay algunos indicadores comunes que pueden mostrar de que es hora de pasar a otra cosa.
Aquí hay 10 escenarios que pueden indicar que es hora de irse:
*Cuando Dios te ha liberado de tu compromiso, creo que el llamado de Dios es, en última instancia, a la persona de Cristo, no a un lugar, pero a veces Dios nos tiene en un lugar específico para una temporada específica. Solo puedes ser un líder por una temporada. Si sientes que Dios te ha liberado para buscar otras posiciones, es probable que sea hora de irse.
*Cuando tu trabajo haya terminado, es posible que hayas logrado para lo que te enviaron para lograrlo. Una vez escribí sobre líderes que necesitan un desafío para mantenerse motivados. Si te has puesto demasiado cómodo, puede ser un momento en que Dios te está preparando para un cambio ... un nuevo desafío.
*Cuando su corazón ha abandonado la organización o su visión: a veces necesita reactivar su corazón. Si Dios no te ha liberado del puesto, por ejemplo, entonces debes encontrar la forma de hacerlo funcionar. En muchos casos, sin embargo, estás libre para mudarte a otro lugar. No debes dañar a la organización quedándote cuando ya no tengas corazón para la misión. Si has dejado de divertirte, no sigas haciendo la vida imposible a los demás.
*Cuando no puede apoyar al liderazgo: necesita saber dónde reside el poder en la organización. Es casi imposible cambiar la organización trabajando contra una estructura de poder arraigada. Pregúntate a ti mismo: "Si siempre va a ser así aquí, ¿me contentaría?"
*Cuando su vida familiar o personal está sufriendo, debido a las demandas de la organización: si tiene que descuidar a uno de ellos, a su carrera profesional o a su familia, en veinte años, ¿qué espera que haya sido?
*Cuando su mente comienza a trabajar en contra de la misión de la organización: si prefiere ver que el lugar fracase, en lugar que tenga éxito; claramente podría ser hora de irse.
*Cuando su relación con compañeros de trabajo o líderes se dañe sin remedio, debe tratar de resolver estas diferencias, sin duda debe ofrecer gracia y perdón, pero cuando es obvio que una relación profesional no puede repararse, puede ser hora de avanzar con tu vida.
*Si la organización o la alta dirección se aventura en prácticas inmorales o poco éticas, no se deje atrapar en el próximo escándalo de noticias.
*Cuando se encuentra físicamente enfermo si el trabajo se le pasa por la mente: el fin de semana (o cuando no está trabajando), si el estrés emocional es mayor de lo que puede manejar, es posible que deba proteger su salud durante su carrera.
*Cuando no tienes la energía suficiente para tirar de tu propio peso, sea por el motivo que sea, ya sea porque te has rendido, estás aburrido o simplemente no puedes mantener el ritmo, si reduces la productividad y no lo haces. No tiene el incentivo para mejorar, tal vez es hora de un cambio en su lugar de trabajo.
Por favor entiende. No soy un derrotista. Dios puede dejarte en un ambiente miserable por una temporada ... o incluso años. Ciertamente lo hizo con algunos de los hombres y mujeres en la historia de la Biblia. También creo que los tiempos descriptos anteriormente no siempre se deben ver como experiencias negativas. Algunas veces Dios usa las experiencias difíciles de la vida para atraernos a Él y abrir nuestros ojos a la próxima oportunidad que Él tiene para nosotros. Nunca hubiera hecho algunos de los movimientos que hice en la vida ... que sé que ahora eran de Dios ... si no hubiera sido por mi situación miserable en ese momento.
Al mismo tiempo, creo que hay veces que un falso sentido de lealtad, co-dependencia o miedo irracional nos impide avanzar aunque Dios no nos está manteniendo en la posición. En mi opinión, proteger nuestro corazón es más importante que proteger un puesto profesional. No tomaría una decisión únicamente sobre uno de estos escenarios, pero si se aplican muchos de ellos ...
Considere esta lista y compárala con tu situación, luego pídale a Dios que confirme en su corazón:
-Si eres libre de irte
-Si ahora es el momento.
¿Qué agregarías a mi lista?
Ron Edmondson
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