domingo, 26 de noviembre de 2017

¿Alguna vez te preguntaste el secreto para estar agradecidos?

¿Alguna vez te preguntaste el secreto para estar agradecidos?

Creo que el secreto para estar agradecido es aprender a estar más contento.

Damos gracias cuando hay un corazón desbordado de agradecimiento. Un corazón lleno naturalmente produce gratitud.

¿Como hacemos eso?

El apóstol Pablo nos dijo que había aprendido el secreto.

Creo que Pablo nos dio algunas pistas en su carta a los Filipenses.

Hermanos,... una cosa hago: olvidándome de lo que queda atrás y avanzando hacia lo que está por delante, busco como meta el premio prometido por el llamado celestial de Dios en Cristo Jesús. (Filipenses 3: 13-14)

Aquí está el remedio de Pablo para estar más contento, más agradecido

-Olvidando lo que está atrás.

¿Ha sido un año difícil? ¿Has cometido algunos errores? Ese día se fue. ¿Sabía usted que? Se acabó. Ya esta, se fue. La pregunta ahora es: ¿qué vas a hacer al respecto? ¿Vas a vivir en el pasado? ¿Aferrarse a la culpa? ¿Rechazar la gracia de Dios en tu vida? ¿Negarse a perdonar? ¿Mantener resentimiento? Si te sientes solo, te enojas o te levantas y sales con otras personas: ¿encuentras amigos y dejas que inviertan en ti? Es posible que tengas que llorar, llorar o pedir perdón, pero puedes dejar que el pasado te controle o lo que viene adelante. No ambos. ¿Cuál elegirás?

-Recordando lo que está por venir.

Los mejores días están por venir si eres un hijo de Dios. Está escribiendo una historia con un final feliz, donde todas las cosas funcionan para un bien final. En este momento tenemos más preguntas que respuestas. Algún día Él proveerá a Sus hijos un descanso sabático. ¿Alguna vez has visto una puesta de sol que te dejó sin aliento o te maravillaste ante la belleza de una montaña que esta como adentro en un cielo nublado? Bueno, solo espera. "Ningún ojo ha visto" lo que Dios ha preparado. Si Cristo está en ti, tienes un Ayudante presente y una recompensa futura. Todo está trabajando para su gloria.

-Perseguir metas valiosas

Sigue a Cristo. Hónralo con tu vida. Ten la mente de Cristo. Ámense los unos a los otros. Ora por tus enemigos. Haz el bien, sin esperar nada a cambio. Llenara tu corazón con más alegría, más satisfacción: más acción de gracias mientras inviertes tu vida en los demás.

Y, más tarde, en Filipenses, Pablo comparte que la "paz de Dios" guardará sus corazones. Estarás lleno de satisfacción.

Y, te encontrarás siendo una persona más agradecida.

Ron Edmondson

No hay comentarios: