viernes, 21 de julio de 2017

4 Ejemplos cuando la estrategia debe guiar o conducir la decisión de un líder

Los líderes a menudo deben tomar decisiones rápidas y decisivas. La experiencia pasada y el instinto pueden ayudar a un líder a hacer una consulta o llamada cuando se necesita una decisión inmediata.

Hay veces, sin embargo, si un líder quiere tener éxito, debe utilizar la estrategia para tomar decisiones. Para definir los propósitos, una decisión estratégica no sólo reacciona en base a cómo se siente el líder - trae a otras personas a la decisión y hace preguntas más grandes, como por qué, cómo, cuándo, dónde, quién y qué. Las consecuencias y ramificaciones de la decisión son muy pesadas antes de que un líder hace la consulta o llamada.

Proteger el futuro de la organización y mantener la confianza de las personas a menudo exige un pensamiento estratégico, por lo que todos los líderes deben aprender a pensar estratégicamente.

Cuando un líder no está necesariamente conectado para pensar estratégicamente, necesitará tener disciplina - simplemente aprender cómo ser estratégico y practicarlo o hacerlo. Afortunadamente, no todas las decisiones que un líder hace requieren el uso de la estrategia, pero cuando el  líder lo hace necesita detenerse y hacerse preguntas más grandes sobre cómo esta decisión impactará el futuro - otra vez, usando preguntas tales como porqué, cómo, cuándo, dónde, quién y qué.

Para ayudarle a comenzar o empezar, comparto algunos ejemplos de veces que un líder necesita ser estratégico con su decisión.

Aquí hay cuatro veces que el líder debe pensar estratégicamente:

-El resultado es incierto

Amo el riesgo, pero el líder debe sopesar el riesgo con el futuro de la organización en mente. En última instancia, el líder tiene la responsabilidad del éxito general de la organización, por lo que un líder tiene que hacer consultas o llamadas finales sobre si o no, un riesgo vale la pena el tiempo, la energía y los recursos, que se invertirán en ella. Esto requiere un pensamiento estratégico. A falta de una "palabra directa de Dios", el líder necesita ser lo suficientemente estratégico como para examinar a fondo la decisión y sus posibles implicaciones futuras. Esto no significa que no se arriesgue - eso es lo que hacen los líderes, pero tomar tiempo para pensar estratégicamente a menudo puede ayudar a eliminar posibles desastres.

-El resultado afecta a otros

Un defecto en el liderazgo es cuando el líder piensa sólo en cómo él o ella ve la decisión y no cómo la decisión afecta a otras personas. El líder sabio piensa estratégicamente para ver como estará la gente bajo esa determinada decisión. Esto es especialmente donde otras personas son traídas a la parte de la estrategia cuando tomamos decisiones. Si el resultado tiene un impacto en otras personas, entonces otras personas deben ser consideradas antes de que se tome la decisión.

-El tema está sujeto a resistencia

La mayoría de los cambios están sujetos a resistencia, pero si una decisión automáticamente va a implicar una batalla por la aceptación, entonces un líder debe planificar estratégicamente la forma en que la decisión se introduce e implementa. Cuantos más resultados potenciales y reacciones favorables tengamos podremos ver la mayor probabilidad de éxito que el cambio puede traer.

-El tema cambia una dirección acordada

Cuando la gente se entusiasma con una dirección en la que la organización va y ellos invierten su corazón y energía en dirigirse en esa dirección, son naturalmente más resistentes a un cambio en la dirección. Los buenos líderes piensan estratégicamente cómo se recibirá este cambio y cómo se debe comunicar para que las personas transmitan entusiasmo por la nueva dirección.

Esos son sólo algunos ejemplos. Ciertamente hay muchos otros. No puedo decirle cuántas veces he visto una decisión que fue en contra de un líder que no pudo pensar estratégicamente. Hicieron lo que creyeron que era mejor, usaban sus tripas o entráñas, instinto o sentimiento interior, pero había demasiadas variables en juego y la decisión se les volvió en contra.

Una buena regla para los líderes podría ser simplemente disciplinarse a hacer una pregunta simple: ¿Tengo que pensar más estratégicamente antes de tomar esta decisión? Y, si la respuesta es sí, hay que empezar a hacer más preguntas y dar participación a más personas. Te hará un mejor líder.

Ron Edmondson

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